martes, 28 de abril de 2009

Bitácora de los fluidos (II)

El sida, la gripe aviar y la influenza, enfermedades contemporáneas que han aparecido por la transmutación de virus emigrados de los animales: la gallina, el cerdo y el mono. La verdadera rebelión de la granja. Cada uno de estos virus se contagia por el contacto gozoso del cuerpo humano: la ingesta de pollo, el beso y el saludo, la sangre y los fluidos del cuerpo encontraron ahí sus formas de transmisión. Los centros de emisión de tales enfermedades tercermundistas fueron África, China y México; en principio, la epidemia fue irradiada desde sus villas miseria. La consecuencia radical: el temor al otro, a su cuerpo y cercanía. La derogación del saludo, el contacto afectivo anulado, la reclusión hogareña, la abstención sexual son los remedios contra las pandemias.